En esta sección puedes dar respuesta a todas tus dudas acerca de la calidad del agua de tu hogar. Contamos con distintos medidores de pH para regular su acidez y medidores de dureza del agua para comprobar si el sistema de osmosis inversa está realizando su cometido de forma correcta.
¡Echa un vistazo a la selección de medidores de agua y añade a tu cesta el adecuado!
El medidor de agua es un elemento poco conocido y usado por la gran mayoría de la población mundial, aunque se trata de un producto de alta importancia tanto en el ámbito doméstico como el industrial. De medidores de agua existen multitud, ya sean de pH, de metales pesados, de salinidad, de dureza, acidez o cal que está presente en el agua de nuestro hogar, piscina de donde almacenemos o consumamos agua.
Para una correcta salud y evitar contraer problemas en contacto con agua con malos valores de los anteriores que hemos mencionado, usaremos distintos medidores que puedes encontrar en esta sección especializada, pero antes de nada vamos a detallarte los distintos tipos de medidores de agua que existen.
De medidores de pH para el agua existen manuales y electrónicos, siendo el primero necesaria la intervención humana en las distintas partes del proceso de obtención, análisis y valoración de la muestra. Por otra parte los medidores de pH electrónicos son tan sencillos de usar como recolectar la muestra de agua y dejar que el dispositivo medidor haga sus análisis automáticamente y realice la valoración dándonos los valores del agua.
En ambos casos, una vez tengamos el resultado del análisis de pH que nos proporcione el reactivo en el caso del medidor manual o bien en la pantalla del electrónico, deberemos tomar cartas en el asunto en caso de tener el pH del agua en valores no idóneos.
El agua se entiende que se encuentra en valores óptimos de pH cuando sus valores de pH se sitúan en 7, todo lo que se encuentre con un valor inferior se considerará ácido, y por lo contrario, mayor que 7 se considera alcalina.
Por lo tanto si nos encontramos con unos valores que no son los óptimos para el agua, deberemos incorporar distintos productos para poder regularlo, así como cloro, floculante o alguicidas según convengan.
La dureza del agua, en mayor parte está formada por calcio y magnesio. Este fenómeno genera rigidez en el pelo, provoca un sabor no agradable en el agua potable a la hora de ser bebida, forma precipitaciones que se incrustan en las tuberías, electrodomésticos o vajilla de nuestro hogar.
Para poder medir si un agua es dura o no, puede realizarse mediante un medidor TDS el cual nos servirá de comprobación una vez haya pasado el agua por todo el sistema de osmosis inversa para saber si el filtrado del agua se ha realizado de manera o correcta o en caso contrario averiguar qué está sucediendo en el sistema para subsanarlo y seguir produciendo un agua de alta calidad.
Las mediciones que se realicen con el sistema TDS, deben marcar un número de PPM, Partículas Por Millón, de 40 o inferior. En caso de que sea un número superior no se estará realizando de forma correcta el filtrado de agua.
Estos son los medidores que engloban todas las distintas comprobaciones básicas que se deben realizar en cualquier piscina, depósitos de agua o bien en el agua potable que consumimos para cerciorarnos de si estamos disponiendo a nuestro cuerpo ya sea de forma interna o externa un agua de calidad.